jueves, 28 de julio de 2011

Amor Amor


Le preste atención por primera vez en el avión. Por dos horas me acompañó, y mi tiempo se paso volando y volando.

Después me lo encontré en un Bar en Medellín. Me conmovió. Pero no lo pude tocar. Solo nos vimos de lejos.

Paso el tiempo… casi me olvido de él… 

Así de repente, un día por él pregunté. Un amigo me dijo que me podía ayudar. 

Así fue como tuvimos nuestro primer encuentro íntimo. Y nos tocamos. Y me gustó. Y quise más. 

Y sentí que esos 5 minutos fueron suficientes…

Ayer nos encontramos por segunda vez. Esta vez el encuentro fue más prolongado. Y nos tocamos. Y me volvió a gustar. Y quiero más.  

lunes, 18 de julio de 2011

Para hacer click en los dias grises! (II)

Canción perfecta para este día gris en Buenos Aires...  Me ilumina el alma.

Dios está en la música. Gracias Miguel. Gracias Vida.






 Buen día, día
Intérprete: Miguel Abuelo

Buen día, día. Día, buen día.
Buen día, perro, mujer buen día.
Arbol buen día, señor buen día.
Buen día, hijo, hermano buen día.
Buen día, dia. día, buen día.
Soy todos tus olvidos
y de todos tus olvidos
aparece mi alimento.

Aqui tu libertad,
aqui tu intención
apelmazada de ser pájaro.
Aqui la piedra de tu risa.
Aqui... mi boca arriba y gritando
Buen día, a todo lo que pasa.
Yo soy el que da rota de tu paso olvidado.
Aquel que te camina,
descalzo entre tus pasos.
Nada sé, no. Nada sé...

Buen día, día. día, buen día.
Buen día, sol, soles buen día.
Tontos buen día, señora buen día.
Buen día, aire, luna buen día.
Aqui tu libertad,
aqui tu intención apelmazada de ser pájaro.
Aqui la piedra de tu risa,
aqui mi boca arriba gritando: Buen día,
a todo lo que pasa.

Juntos cavaremos hasta la superficie de mi tierra.
Tu dolor es amor transformándose en mundo
y una caja es mi cuerpo donde el dolor no cesa.
Adentro mío;
Escarba hoy en tu mano tratando de
ubicarte en la cima.
Embelesate ahora que estas vivo.
Este mundo era ya una loqueria.
Vamos...adelante.
Llevaras todo junto,
llanura y vegetal entrelazado.
Agua sobre fuego y fuego bajo tierra.
Sé bien que tus coros se pondrán
contentos.

Vamos...adelante.
Que suba lo que crece.
Lo que se fue se vaya.
Aqui voy yo.
El que río y río
bajo y sobre las vertientes.
Aqui voy yo,
el que tentó al amigo.
Oíd, oíd, que hermoso ría que suena en tí
llamando, humano, humano, humano...

El pensamiento corre,
el cuerpo baila.
Los ojos iluminan.
La voz llega y escapa.
Por que trastocar la lozanía
que hay en tu alma?
Ah! La estridente coraza.
Oh! La enfrascadora jornada.
Brindo contigo, Holderlin.
Por lo gratis, al bendición etérea.
Y oíganse las manos serviciales.
La tares del amor,
creativo y fraternal.

Buen día, remanso, tempestad buen día.
Buen día, ruta, muerte buen día.
Buen día, día.
Ey! Y si hubieras contraido
compromiso con la muerte?
Y si hubieras muerto acaso?
Peleando o creyendo.
O intentando escaleras para atrapar las
espaldas del cielo?
Hubieras llevado gloria hacia allá
(hacia desde donde ya no se vuelve)
Pero también, hubieras dejado fábula,
utopía y polvo
entre mis cofrades mortales.

Pobre eres si no llevas repletas las arcas
de tu corazón.
Idiota perdido aquel que no se reconozca en un
odio insensato.
Que imbécil no verá su pasión mas
desjuiciada.
Y que clase de rico será
quien no lleve todo junto y en un solo puño
la psiquis y el latido de su pueblo.

Buen día, dia. día buen día.
Buen día estrella, humildes buen día.
Buen día cerca, lejos buen día.
Buen día, buenos locos buen día.
Buen día, mañana. Traición buen día.
Del ultimo sueño vengo,
del ultimo sueño soñado.
Han caído cortezas de mí.
Imperios han venido y desaparecido.
He comido el pan de la locura.
He sido cuerpos de otros cuerpos
y me he despertado en fiestas y caídas.

He sido celoso como mi ángel guardián
y paciente como las arañas.
Tanto he dormido en el azul barro del
invierno como he vuelto desde la blanca luz
de los ciegos del mundo desierto
entre cactus, reptiles y minerales.
Buen día, dia. día, buen día.
Mi joven realidad ya no se busca
en los reflejos de un espejo astillado.
No quiero ser un barco anclado
sobre un río tormentoso.

¡He venido a mover y darle
marcha a la fanfarria!
me fecunda la música que tonifica
el cura.
Los poetas me acusan de deber ser
valiente.
Las artes para siempre,
las musas sin cadenas.
Huelo, como vino, juego.
Me recuesto cara al cielo.
y mi reposo goza en la paz de cada origen.

Buen día, dia.
Adiós barcos anclados sobre torrentosas aguas.
Adiós espejos astillados.
No nosotros, regocijo del rocío
sobre narices esplendidas.
No, no, no,
no nosotros
elásticos elebradores de deseos.
Buen día, dia.
Buen día, futuro venturoso.
Buen día, dia.

lunes, 11 de julio de 2011

28 Años (y medio), 28 Lecciones

En este momento de de transición de la persona que fui a la persona que soy, me di cuenta que el blog no es sólo para mis lectores, a veces escribo para mí.

Así que aquí me dejo estas notas… cosas que aprendí una y otra vez y no quiero olvidar.

No van en orden cronológico ni las aprendí en una situación en particular… son trozos de estos pocos años de vida.

  1. Para encontrarse, es esencial, primero perderse. Una y otra vez… uno nunca se encuentra para siempre.
  2. Puedo vivir en cualquier lugar del mundo, y estar bien. (Lo aprendí primero en EEUU, lo confirmé en India.)
  3. Lo único constante es el cambio (ya lo dijo Aristóteles)… Y es lo que nos mantiene vivos. Un poco de rutina también hace falta.
  4. Haber prestado algo no quiere decir que me lo van a devolver.
  5. Correr le hace bien a mi cuerpo, pero más que nada vigoriza a mi alma.
  6. Puedo hacerme amigos en cualquier lado… Al menos encontrar gente linda para acompañarse, con quienes caminar por un rato... o para siempre…
  7. Hay amigos por un tiempo, y los hay para siempre. Ambos son imprescindibles y muy queridos. Y en realidad, nunca sabemos bien quien es quien.
  8. Mis mejores amigos, son los hermanos que elegí. Y mi hermano, mi mejor amigo.
  9. Me puedo volver a enamorar, una y otra vez. De lugares, de momentos, y de personas. De la misma persona, o de personas distintas. Por unos días, o para siempre…
  10. Es lindo estar sola con mi alma. A veces me agrada más que estar con gente. Pero sólo a veces.
  11. Cada tanto, puede aparentar que voy a bajar los brazos… pero nunca me doy por vencida. Y esto no quiere decir que no sepa renunciar a ciertas cosas.
  12. Lo único que me duele perder… son las personas… (¡Para todo lo demás, existe MasterCard!)
  13. Los sueños se hacen realidad… y no hay vacio más grande que el vacio de sueños... (De paso comento que me acabo de hacer una listita nueva – ¡No asustarse!)
  14. No puedo vivir mi vida como si cada día fuese el último. Siempre tengo que dejar algo para después, porque sino el después me agarra vacía. Y los sueños más lindos de alcanzar, no se alcanzan en un día. ¡Ojo! tampoco tengo toda la eternidad.
  15. Existe el Chau, el Hasta Luego, y el Hasta Siempre. (De todas maneras, odio las despedidas.)
  16. Los regalos más lindos y valiosos no se elijen ni con los ojos ni con la mente... se elijen con el corazón. (Algunos regalos que así recibí: una piedra de la Isla del Sol, el Sol que me alumbra el camino, el llamado telefónico de un amigo despistado para mi cumpleaños, una receta de Leikaj de Miel, una lapicera con mi nombre grabado, entre otros.)
  17. Se puede tocar el corazón de la gente, pero no con las manos. ¡Así que tampoco se puede agarrar!
  18. Hay gente que me acompaña siempre, sea donde sea que estén mi cuerpo o mi mente (que no están siempre en el mismo lugar).
  19. No hace falta estar físicamente cerca o hablar todos los días con alguien para sentir que existe un vínculo indestructible (igual me siento mejor cuando mantengo el contacto con mi gente linda).
  20. No puedo esperar que la gente sea o se comporte igual que yo... ni tampoco quiero ser como el resto de la gente. Y así hay que quererse.
  21. Si mi corazón entiende, todo es posible. El problema ocurre cuando mi corazón trata de hablarle a mi razón… Pero al final se entienden.
  22. Puedo dar sin recibir. El universo se encarga del resto.
  23. No existen los héroes. Simplemente hay gente que tiene sueños un poco más ambiciosos. Pero todos los seres humanos tenemos la capacidad y habilidad de soñar y de hacer nuestros sueños realidad. Algunos también perseveran más que otros… Y otros simplemente tienen mejor marketing.
  24. Después de toda subida, hay una bajada. Y después de toda bajada, una subida. Esto se aplica a los caminos y a las montañas en general, y a la vida en particular.
  25. El universo nos da señales cuando más las necesitamos.
  26. La magia existe. Sólo hay que saber mirar (¿o saber sentir?)
  27. Creo en dios, soy religiosa. Y esto no tiene nada que ver con el judaísmo ni ninguna religión.
  28. Soy FELIZ. Siempre. Incluso en mis momentos de mayor llanto, cuando siento más angustia, impotencia o injusticia. Soy feliz, porque soy así y ya no sé ser de otra manera. (Honestamente, igual me gusto más a mi misma los días que estoy sonriente).

Inspirado en Iruya, Salta:










jueves, 7 de julio de 2011

Diana Divaga

Siempre me gustaron los Abuelos de la Nada, es mi grupo de música preferido por excelencia...

Como si hubiese sabido que esta fue su primer canción...



Diana Divaga ( Los abuelos de la nada, 1968)

Diana es la niña que besa las flores
Saluda a los pájaros y canta.

Diana divaga, yo acaricio su piel
Ella me da un beso, y escapo con él.

Tiene una historia verde y amarilla
Con una guitarra y un pan.

Diana, vienen hombres hacia acá,
Diana, no te pongas a llorar
Diana, que no es hora de llorar
Diana, a tus flores pisarán

Diana divaga, yo acaricio su piel.
Ella me da un beso, yo escapo con él

Tiene una historia mi Diana divaga
Que cuando la miro con ansias sonríe
Y cuando anochece...

Diana Divaga es el primer sencillo del grupo de rock argentino Los Abuelos de la Nada, lanzado en 1967 por CBS Discos.
La historia de Los Abuelos comienza cuando un joven llamado Miguel Ángel Peralta se las ingenia para convencer a un productor de que tenía una banda. Resultó ser muy convincente al mencionar el extraño nombre de Los Abuelos de la Nada, ya que el productor le dio fecha para grabar. El problema es que esa banda no existía, pero Miguel y su amigo Pipo Lernoud se las ingeniaron para reclutar músicos. Así fue como dieron con el baterista Héctor Pomo Lorenzo, el tecladista Mayoneso, Alberto y Micky Lara se ocuparon del bajo y la guitarra, y además contaron con guitarristas que luego serían fundamentales en la historia del rock: Norberto Pappo Napolitano y Claudio Gabis.
La canción que da título al sencillo es bastante particular para la época. Son cuatro minutos de psicodelia pura (tanto en la letra como en la música), con arreglos de violonchelo y sonidos de truenos, explosiones y campanas.
Cuando la discográfica lanza el sencillo edita Diana Divaga, transformándola en una canción que no llega a los tres minutos, con la intención de que logre difusión radial. La noticia obviamente no le agradó a los músicos.
Diana Divaga es considerado por muchos el primer single progresivo del rock argentino.

martes, 5 de julio de 2011

Para Vos...

Gracias a mi hermano que me ilumina el alma - con libros y textos a veces, y otras veces, simplemente con su hermandad-... Gracias a él me encontré con este texto de Carlos Castaneda, en su Libro "Las Enseñanzas de Don Juan". Hoy se lo dedico a todas mis personitas especiales, y a una en particular.
---------------

Cuando me disponía a partir, decidí preguntarle una vez más por los enemigos de un hombre de conocimiento. Aduje que no podría regresar en algún tiempo y sería buena idea escribir lo que él dijese y meditar en ello mientras estaba fuera.
Titubeó un rato, pero luego comenzó a hablar:
"Cuando un hombre empieza a aprender, nunca sabe lo que va a encontrar. Su propósito es deficiente; su intención es vaga. Espera recompensas que nunca llegarán, pues no sabe nada de los trabajos que cuesta aprender.
"Pero uno aprende así, poquito a poquito al comienzo, luego más y más. Y sus pensamientos se dan de topetazos y se hunden en la nada. Lo que se aprende no es nunca lo que uno creía. Y así se comienza a tener miedo. El conocimiento no es nunca lo que uno se espera. Cada paso del aprendizaje es un atolladero, y el miedo que el hombre experimenta empieza a crecer sin misericordia, sin ceder. Su propósito se convierte en un campo de batalla.
"Y así ha tropezado con el primero de sus enemigos naturales: ¡el miedo! Un enemigo terrible: traicionero y enredado como los cardos. Se queda oculto en cada recodo del camino, acechando, esperando. Y si el hombre, aterrado en su presencia, echa a correr, su enemigo habrá puesto fin a su búsqueda."
¿Qué le pasa al hombre si corre por miedo?
Nada le pasa, sólo que jamás aprenderá. Nunca llegará a ser hombre de conocimiento. Llegará a ser un maleante, o un cobarde cualquiera, un hombre inofensivo, asustado; de cualquier modo, será un hombre vencido. Su primer enemigo habrá puesto fin a sus ansias.
¿Y qué puede hacer para superar el miedo?
La respuesta es muy sencilla. No debe correr. Debe desafiar a su miedo, y pese a él debe dar el siguiente paso en su aprendizaje, y el siguiente, y el siguiente. Debe estar lleno de miedo, pero no debe detenerse. ¡Esa es la regla! Y llega un momento en que su primer enemigo se retira. El hombre empieza a sentirse seguro de si. Su propósito se fortalece. Aprender no es ya una tarea aterradora.
"Cuando llega ese momento gozoso, el hombre puede decir sin duda que ha vencido a su primer enemigo natural."
¿Ocurre de golpe, don Juan, o poco a poco?
Ocurre poco a poco, y sin embargo el miedo se conquista rápido y de repente.
¿Pero no volverá el hombre a tener miedo si algo nuevo le pasa?
No. Una vez que un hombre ha conquistado el miedo, está libre de él por el resto de su vida, porque a cambio del miedo ha adquirido la claridad: una claridad de mente que borra el miedo. Para entonces, un hombre conoce sus deseos; sabe cómo satisfacer esos deseos. Puede prever los nuevos pasos del aprendizaje, y una claridad nítida lo rodea todo. El hombre siente que nada está oculto,
"Y así ha encontrado a su segundo enemigo: ¡la claridad! Esa claridad de mente, tan difícil de obtener, dispersa el miedo, pero también ciega.
"Fuerza al hombre a no dudar nunca de sí. Le da la seguridad de que puede hacer cuanto se le antoje, porque todo lo que ve lo ve con claridad. Y tiene valor porque tiene claridad, y no se detiene en nada porque tiene claridad. Pero todo eso es un error; es como si viera algo claro pero incompleto. Si el hombre se rinde a esa ilusión de poder, ha sucumbido a su segundo enemigo y será torpe para aprender. Se apurará cuando debía ser paciente, o será paciente cuando debería apurarse. Y tonteará con el aprendizaje, hasta que termine incapaz de aprender nada más.
¿Qué pasa con un hombre derrotado en esa forma, don Juan? ¿Muere en consecuencia?
-No, no muere. Su segundo enemigo nomás ha parado en seco sus intentos de hacerse hombre de conocimiento; en vez de eso, el hombre puede volverse un guerrero impetuoso, o un payaso. Pero la claridad que tan caro ha pagado no volverá a transformarse en oscuridad y miedo. Será claro mientras viva, pero ya no aprenderá ni ansiará nada.
Pero ¿qué tiene que hacer para evitar la derrota?
-Debe hacer lo que hizo con el miedo: debe desafiar su claridad y usarla sólo para ver, y esperar con paciencia y medir con tiento antes de dar otros pasos; debe pensar, sobre todo, que su claridad es casi un error. Y vendrá un momento en que comprenda que su claridad era sólo un punto delante de sus ojos. Y así habrá vencido a su segundo enemigo, y llegará a una posición donde nada puede ya dañarlo. Esto no será un error ni tampoco una ilusión. No será solamente un punto delante de sus ojos. Ése será el verdadero poder.
"Sabrá entonces que el poder tanto tiempo perseguido es suyo por fin. Puede hacer con él lo que se le antoje. Su aliado está a sus órdenes. Su deseo es la regla. Ve claro y parejo todo cuanto hay alrededor. Pero también ha tropezado con su tercer enemigo: ¡el poder!
"El poder es el más fuerte de todos los enemigos. Y naturalmente, lo más fácil es rendirse; después de todo, el hombre es de veras invencible. Él manda; empieza tomando riesgos calculados y termina haciendo reglas, porque es el amo del poder.
"Un hombre en esta etapa apenas advierte que su tercer enemigo se cierne sobre él. Y de pronto, sin saber, habrá sin duda perdido la batalla. Su enemigo lo habrá transformado en un hombre cruel, caprichoso."
¿Perderá su poder?
-No, nunca perderá su claridad ni su poder.
-¿Entonces qué lo distinguirá de un hombre de conocimiento?
Un hombre vencido por el poder muere sin saber realmente cómo manejarlo. El poder es sólo un carga sobre su destino. Un hombre así no tiene dominio de si mismo, ni puede decir cómo ni cuándo usar su poder.
La derrota a manos de cualquiera de estos enemigos ¿es definitiva?
Claro que es definitiva. Cuando uno de estos enemigos vence a un hombre, no hay nada que hacer.
¿Es posible, por ejemplo, que el hombre vencido por el poder vea su error y se corrija?
No. Una vez que un hombre se rinde, está acabado.
¿Pero si el poder lo ciega temporalmente y luego él lo rechaza?
Eso quiere decir que la batalla sigue. Quiere decir que todavía está tratando de volverse hombre de conocimiento. Un hombre está vencido sólo cuando ya no hace la lucha y se abandona.
Pero entonces, don Juan, es posible que un hombre se abandone al miedo durante años, pero finalmente lo conquiste?
No, eso no es cierto. Si se rinde al miedo nunca lo conquistará, porque se asustará de aprender y no volverá a hacer la prueba. Pero si trata de aprender durante años, en medio de su miedo, terminará conquistándolo porque nunca se habrá abandonado a él en realidad.
¿Cómo puede vencer a su tercer enemigo, don Juan?
Tiene que desafiarlo, con toda intención. Tiene que llegar a darse cuenta de que el poder que aparentemente ha conquistado no es nunca suyo en verdad. Debe tenerse a raya a todas horas, manejando con tiento, y con fe todo lo que ha aprendido. Si puede ver que, sin control sobre sí mismo, la claridad y el poder son peores que los errores, llegará a un punto en el que todo se domina. Entonces sabrá cómo y cuándo usar su poder. Y así habrá vencido a su tercer enemigo.
"El hombre estará, para entonces, al fin de su travesía por el camino del conocimiento, y casi sin advertencia tropezará con su último enemigo: ¡la vejez! Este enemigo es el más cruel de todos, el único al que no se puede vencer por completo; el enemigo al que solamente podrá ahuyentar por un instante.
"Este es el tiempo en que un hombre ya no tiene miedos, ya no tiene claridad impaciente; un tiempo en que todo su poder está bajo control, pero también el tiempo en el que siente un deseo constante de descansar. Si se rinde por entero a su deseo de acostarse y olvidar, si se arrulla en la fatiga, habrá perdido el último asalto, y su enemigo lo reducirá a una débil criatura vieja. Su deseo de retirarse vencerá toda su claridad, su poder y su conocimiento.
"Pero si el hombre se sacude el cansancio y vive su destino hasta el final, puede entonces ser llamado hombre de conocimiento, aunque sea tan sólo por esos momentitos en que logra ahuyentar al último enemigo, el enemigo invencible. Esos momentos de claridad, poder y conocimiento son suficientes."

Las Enseñanzas de Don Juan, Carlos Castaneda

lunes, 4 de julio de 2011

El 2010 se me fue produciendo este informe...

"Deposit Assesment in Nepal"

Es el resultado de varios meses de trabajo y un proyecto que me dio la oportunidad de conocer uno de mis paises preferidos en el Mundo: Nepal.

Disfruten!

Diana